Caña de Azúcar, un tributo a la comida que transmite emociones

ADVERTISING

Adnaloy Osío ha recreado en su pequeño restaurante de la calle Muntaner un templo a sus recuerdos y, a su vez, un tributo a su familia, proveniente de Venezuela. Emociona escuchar, contado por ella misma, el relato de sus peripecias…

Adnaloy Osío ha recreado en su pequeño restaurante de la calle Muntaner un templo a sus recuerdos y, a su vez, un tributo a su familia, proveniente de Venezuela. Emociona escuchar, contado por ella misma, el relato de sus peripecias hasta llegar al Caña de Azúcar, pasando por ilegalidad de papeles, penurias económicas y más de un intento desesperado de tirar la toalla.

Osío, como buena luchadora, valora su momento actual, dulce, de reconocimiento. Y en su generosidad rinde buen mérito de este éxito a su padre y su madre, el origen de lo que ella es ahora. Su padre, médico, dedicó tiempo y esfuerzos en propagar entre una sociedad muy empobrecida que la arepa, elaborado a base de maíz, les ayudaría a subsistir. Él es su modelo de lucha para mejorar la vida de las personas, y su madre encarna la cocina, el vehículo a través del cual hacerlo, con sabor, ternura y dedicación.

Caña de azucar
FOTOGRAFÍA MERCÈ GOST

A corazón abierto cuenta que todos los detalles en Caña de Azúcar la hacen viajar a momentos de su historia familiar, desde la campana que cuelga de una pared y que su abuelo tocaba para llamar a los nietos, pasando por la ventana de la fachada. Una ventana que existía en el domicilio familiar y que la pequeña Adnaloy quería que a través de la misma, su madre y abuela vendieran su rica comida casera, ¡haciéndose millonarios!

Ella enamora. Su comida, más. Sus platos nacen cuando ella bucea en su privilegiada memoria sensorial y recrea en una receta personal, los sabores de su infancia y adolescencia. Su cocina, como la gastronomía venezolana, se basa en el maíz y en el mextizaje. Por ello, sus tequeños llevan sobrasada y se acompañan de una sutil salsa de ají amarillo y otra llamada “papelón”, con base de panela. Delicioso.

Los estandartes de su cocina son los tequeños y las cachapitas, unas tortas de maíz dulce que se cocían a la leña, y con ellos va a conquistar los corazones de los barceloneses, acercándonos a la gastronomía venezolana con comfort food del bueno. ¿Y porqué no añadir la arepa? Caseras, elaboradas con maíz choclo del Perú, pilado. La de carpaccio de aguacate con panceta a baja temperatura, nata criolla y chicharrón es pura maravilla. Se acompaña de pico de gallo (tomate, cebolla y cilantro) para así rebajar la grasa del cerdo. O la arepa de asado negro, con queso cheddar curado, lombarda limonada, trufa y brotes de guisante. Para llorar.

Caña de azucar - bcn foodie guide
FOTOGRAFÍA CARLOS CARRILLO

Cuando Osío abrió el Caña de Azúcar, hará dos años, sabía que los platos serían para compartir y se servirían en el centro de la mesa, como en su casa. Y sólo puedes comer allí si tienes reserva, que se debe formalizar por mail. Mail que Osío responde informando de los nuevos platos porque no existe carta propiamente.

El viaje de esta joven chef ha sido largo: desde que en 2007 estudió en la Hoffman, aprendió de Berasategui (al que ella denomina “mi papá”) y de Aduriz (del cual aprendió la disciplina y la perfección) y pasó por etapas en Berlín ha llovida mucho. Regresó a Madrid para trabajar en La Cabra y, como último traslado (esta vez a Barcelona) a las cocinas de L’Angle, donde gestó Caña de Azúcar. Y con 32 años, y un problema en las rodillas que nubla su mirada, tiene claro que debe disfrutar del momento y cuidar a sus clientes y a los suyos.

A la pasión que siente en la cocina se le suma la que profesa a la cerámica. Actualmente, está trabajando en su propia línea de vajilla, bajo la marca Meicocha, persiguiendo la perfección, transmitir con esa vajilla todo el background emocional y espiritual que Osío quiere que el comensal sienta al probar su cocina.

Todo un viaje capitaneado ahora por las hermanas Osío, disponible en la calle Muntaner 69. De martes a viernes, domingos cerrado.

ADVERTISING
ADVERTISING
IAVJVlGAok

Lectura relacionada