La ostra es capaz de hacernos sentir los tres sentimientos que definen la conocida exclamación “¡ostras!”: admiración, asombro o contrariedad. Casi nada para un producto que, como quien dice, acaba de irrumpir en el panorama como una de las tendencias gastronómicas de 2018. En Barcelona, empiezan a crecer (o a brillar con luz propia) en las cartas de los restaurantes más top y nosotros os traemos una lista del “top 5 ostras en Barcelona” de dónde podéis encontrar la preciada perla. En este caso, en forma de sabrosa carne. En estos lugares, como la ostra pasa de estar en el fondo del mar a la cresta de la ola, la expresión está más justificada que nunca: “¡Ostras, qué placer!”
Desde su apertura, este restaurante de Sant Gervasi ha apostado por este producto dedicándole una posición de lujo en la carta. Tanto es así que cuenta con Oyster Bar compuesto por tres tipos: Fine de Claire, la Speciale de Claire y Speciale Utah Beach. Cada una de estas tiene su propio gusto, pero todas comparten carnosidad. Para degustarlo, querido foodie, tienes dos opciones. Al natural o “con alguna cosa de más”. Por ejemplo, con sabores actualizados como un dashi de bolets y espuma de asado. ¿Un consejo? Olvídate del limón.
Existe un mito que dice que las ostras son afrodisíacas y, la verdad, no sabemos si será cierto o que en Gresca Bar hacen muy bien su trabajo, pero su ostra braseada da como para fantasear un buen rato. El sabor ahumado casa a la perfección con la apreciada carne y, junto a sus otras tapas, se convierten en una de las excusas por las que volver una y otra vez. Sobre todo, porque este alimento es de gusto adquirido y se necesita de algún entrenamiento antes de que lo valoremos como se merece.
El chef Alain Guiard en su propuesta situada en el Hotel Neri no deja fuera a este manjar del mar. Su carta llena de platos para compartir de corte clásico con productos de mercado y temporada, también esconde ostras al natural y/o acompañadas con ingredientes renovadores. Además de las naturales, las tienen con manzana ácida y caviar de aceite y también con kimchi y yuzu. Sin duda, una dirección a apuntar donde vivir una experiencia gastronómica de excelente calidad-precio en un entorno memorable.
Si creías que probar el mar en Sants no era posible, estás muy equivocado. En La Mundana incluyen las ostras en su carta para los paladares que busquen este bocado marino con toques modernos y tradicionales. Esto es, con sabor a la personalidad de este imperdible de la ciudad. Igual de imperdible es su ostra ahumada al momento, una de nuestras favoritas de las cuatro que se ofrecen. Todo un espectáculo de sabores que combinan a la perfección con el resto de platos frescos de este local.
Para terminar, de la pequeña cocina de Plata Bistró también salen ostras. Eso sí, no nos hacemos responsables si cuando lo visitas no las encuentras. El mercado y los proveedores, según los criterios de temporada mandan en este restaurante acogedor. Otra cosa de la que no nos hacemos cargo es de asegurar que vayas a comer la ostra al estilo tradicional. Puede que la encuentres en una tortilla abierta, adaptada a los gustos modernos. En resumen, otra manera de reflejar la personalidad de un lugar a través de la presentación de la ostra.
