El Hospitalet está on fire, y la frontera mental que tenemos los barceloneses con respecto a esta ciudad destacada del Baix Llobregat se está dinamitando gracias a una comunicación ágil con la ciudad… y a propuestas gastronómicas como las de This&That. Propuestas que aportan valor y sabor a una zona que Pablo Carrizo y Mónica Artero escogieron para asentar su cocina.
Listos como zorros, usan un refrán para explicar el porqué de la huida de la gran urbe: el tuerto es el rey en el país de los ciegos. Hará tres años, esta pareja arriesgó creando este restaurante claramente de autor, con un marcado discurso que aglutina recetarios de cocinas de todo el mundo, añadiendo técnicas e ingredientes asiáticos, como el kimchi, las salsas teriyaki o los encurtidos (que son caseros), etcétera.
Se han ganado la parroquia de L’Hospitalet a pulso, han sido pioneros en esta zona limítrofe a la Barcelona industrial y estos les reporta la fama de cabeza de cartel con una carta de veinte referencias que no discrimina entre entrantes y principales, pues el formato en tapa de los platos pide a gritos ser compartido. Según Artero, que lidera la sala, con cinco o seis platos, uno se siente en la misma gloria. Para los amantes de los degustaciones, justo este mes empiezan con uno interesante: ocho platos con aperitivo y dos postres por 50€, más 25€ si lo acompañas de un maridaje consistente en una referencia de rosado, otra de blanco, tinto y un dulce final.
Esta alta cocina de barrio que describe el chef Artero con una cierta timidez cristaliza en uno de los mejores menús de mediodía probados hasta la fecha. La pista nos la dió Jordi Luque, y la realidad superaba con creces la ficción: por 13,50€ se puede gozar de primeros como unas gírgolas a la brasa con puré de celeri y kimchi espectaculares (sabor a humo y brasa, potente en boca) o un salmón ahumado con ajoblanco de coco y pepino a la brasa. Y de segundos maravillosos, como los calamares salteados con pisto de cebolla caramelizada y patatas ratte (cocción suprema) o una pluma ibérica a la parrilla con puré de guisantes, sésamo y salsa teriyaki. Los postres, golosones: trufa de chocolate negro con espuma de chocolate blanco o un cremoso de pera Williams con gelatina de amaretto y almendras.
En definitiva, platillos con gran imaginación y técnica, con cuatro opciones de primero y cuatro de segundo, incluyendo postre y café, a diario. Para Pablo y Mónica, pivotar con ingredientes y elaboraciones asiáticas es a menudo el horizonte creativo en el cual encontrar inspiración para diseñar menús interesantes, que deben incluir siempre una opción de pescado, otra de carne y una tercera de verduras.
Una acertada relación calidad-precio, un servicio en sala amigable pero esmerado, informal, apoyan los platos de Carrizo, un peazo de chef con muchos servicios en Ibiza y en los fogones de estrella Michelin a sus espaldas. Si a ellos le sumas un ticket medio de entre 25/35€ por las noches y una terraza fresca desde la cual sorber cualquiera de las ocho referencias de su carta de cocktail… ir a L’Hospitalet no parece mala idea, ¿verdad?
De martes a sábado, de 13:15 a 16h, puedes disfrutar del menú. Las noches del jueves a sábado, son territorio de carta y degustaciones, de 20:30 a 23:00h. Los domingos, cerrado.
