El Barra Alta llega a Sant Gervasi para hacerse un hueco en el corazón de los amantes de la buena carne y del excelente pescado y marisco, de aquellos que peregrinan por una ostras indecentemente sabrosas a un precio decente y de quienes comparten plato acompañado de un vino que alegra conversaciones e intimidades.
Porque el Barra Alta es un asunto de tríos: tres socios, tres chefs a la cabeza (dos en cocina y otro con un pie más metido en la sala) y del bueno, bonito y barato en su versión más noble, la de la calidad a su justo precio.
El local, acogedor y elegante pero sin estridencias, cede todo el protagonismo a una cocina vista donde las zonas de frío y caliente se ven arropadas por una barra alta que rodea su perímetro, una oportunidad para no perderse detalles de lo que César Guillén y Marco Arriaga (y equipo) están trabajando afanosamente. Y como la observación requiere de tiempo, y el tiempo cuando mejor se invierte es disfrutando, en esa misma barra se puede gozar de más cosas que “las vistas”, como por ejemplo propuestas sabrosas elaboradas con la tríade de ostras Fine de Claire, Speciale de Claire y Speciale Utah Beach acompañadas de cava, cerveza premium, vermut o vino a copas.
El alma de Barra Alta radica en su foco en el producto y en la máxima excelencia del mismo, con la voluntad de democratizar esa altísima calidad con unos precios ajustadísimos. Para ello, se han rodeado de proveedores como Premium Shellfish (conocidos por sus bogavantes y vieiras) y Original Gourmet (distribuidora de marcas como Rougié, Carpier o cava Rimarts).
Además de otorgar reinado absoluto al producto, en Barra Alta miman el vino y las raciones hechas con “seny”: mientras que el vino puede adquirirse en el local (a precio de tienda) o consumirse en mesa (aplicando un suplemento de tan sólo 6€ de descorche), las raciones de las mesas se determinan según los comensales interesados en probarlas. Así, si son cinco comensales, las raciones se pensarán para que disfruten los cinco por igual, aunque no se trate de unidades.
Para picotear algo, la barra es el lugar ideal para disfrutar de la excelente selección de producto que ha realizado Thierry del reconocido BOB Oyster BCN, con una breve carta de Oyster Bar complementada con caprichos como sashimis de ventresca, vieira o tartar de ostras y ternera. También disponible para llevar a casa, porque ¿quién se resiste a disfrutar en casa y de forma íntima de una docena de ostras y un buen vino a precio de tienda?
La propuesta gastronómica la firman los tres chefs de la casa (Arriaga, Guillén y Roca) y es un reflejo de su experiencia y de la versatilidad de sus paladares: en la carta conviven recetas creativas como un tartar de bogavante y vieira sobre tortita crujiente o los chicharrones de pulpo con mayonesa sriracha con platos tradicionales y clásicos como un cap i pota de cerdo con bacalao, las croquetas o los buñuelos… pero con guiños a la diversión en las salsas, rebozados (con panko) o aliños agridulces. Huyendo de la fusión, en Barra Alta sus chefs buscan pequeños revulsivos que rejuvenezcan las recetas, respetando el producto y sin enmascarar su sabor.
Atención especial merecen los fuera de carta de entre 4 y 5 platos, elaborados con producto fresquísimo y de temporada, como los nuggets de salmón ahumado con mayonesa de miso rojo, elaborados con las quijadas del pescado, finas y sugerentes. O unos guisantes del Maresme con colitas de cigala, un “mar i muntanya” clásico ejecutado con elegancia.
El menú de mediodía lo ofrecen a 14,95€, a escoger entre cuatro primeros y cuatro segundos, incluyendo postre, pan y bebidas. Y recomendamos encarecidamente que se reserve (o se llame) antes de ir, ¡porque normalmente los mediodías están packed!
Horarios: los lunes, martes y miércoles sólo abierto de mediodía, desde las 13 hasta las 16h. De jueves a sábado, además, con turno de cenas, de 20h a 00.00h. Festivos, cerrado.
