Que nos gustan las piscinas es tan evidente como natural. Cuando flotamos relajados con el sol en la cara, fluimos de otra forma. Pero no todas las piscinas son como las de los hoteles de lujo, así que siempre que podemos nos tiramos de cabeza a la buena vida. Pero para tocar el cielo no hace falta buscar el hotel con la piscina a más altura, sino encontrar el que tenga el mejor pool bar. Asegúrate la felicidad completa y ¡al agua platos!
Gran Hotel La Florida – Les Terasses
No hay mejores vistas de Barcelona y quizá del mundo entero que las que ofrece este exquisito palacete desde su increíble ubicación. En la parte más elevada de la montaña más alta de Barcelona y mirando al mar, encontramos una infinity pool y un bar con alma de restaurante. La naturaleza del entorno marca un ritmo slow que acelera las ganas de disfrutar de cada detalle.
La carta ofrece, sin timidez alguna, platos elaborados como arroces y mariscos que sorprenden a aquellos que siempre se resignan a un Club Sándwich mientras aún les gotea el bañador. El servicio, propio de las mejores salas, hace vivir al comensal una experiencia de altura, y no hablamos de altitud.
Mandarin Oriental Barcelona – El Terrat
De la zona alta a pleno centro de la ciudad. El Terrat, la propuesta más informal del insigne Hotel Mandarin Oriental, no podía faltar entre nuestra selección de pool bars favoritos. Esta azotea, además de estar situada en la más prestigiosa y exclusiva calle de Barcelona, cuenta con una de las vistas más bonitas de la ciudad.
No se nos ocurre nada mejor que disfrutar de la auténtica cocina peruana y nikkei de la mano de Gastón Acurio, uno de los chefs más prominentes del momento, tras unos cuantos chapuzones y unas cuantas horas de tostarse al sol. Cheviches, tiraditos… la mejor propuesta para bajar unos grados los días más calurosos del año.
Fairmont Rey Juan Carlos I – The Terrace
Bajo una encantadora pérgola de caña, con vistas al jardín y la piscina del hotel, The Terrace se encargará de llenarte el estómago y hacerte disfrutar. Carnes gourmet como el entrecot de vaca vieja, pescados, mariscos, todo preparado ante ti en una barbacoa, su gran especialidad.
Disfrutar de las tardes distendidas en sus más de 25.000 metros de jardines y escaparse del bullicio de la ciudad en pleno agosto nunca había sido tan fácil.
Con las manos arrugadas y la felicidad desbordada, nos dirigimos a un hotel que no tiene piscina pero su bar es uno de esos lugares en los que no puedes no estar. Así que vamos…
Renaissance Barcelona – Goja Rooftop
Si lo que buscas es estar “en el medio del meollo” pero evitando las hordas de turistas propias de Paseo de Gracia, esta terraza es perfecta para ti.
Situada en la octava planta del hotel Renaissance, en pleno corazón del Eixample, este espacio de estilo contemporáneo ofrece unas vistas privilegiadas en un entorno orgánico y confortable gracias a su decoración en madera y su mobiliario de formas redondeadas.
Aburrirse no es una opción, pues la programación diaria está cargada de experiencias desde afterworks con actuaciones de música en vivo, sesiones de DJs o incluso, durante las noches de luna llena, lecturas de tarot maridadas con una gran variedad de cócteles y tapas. El mejor plan para desconectar de todo y vivir las mágicas noches del verano en la ciudad.
Si con tanto baño os entra hambre y queréis daros un capricho en seco, os recomendamos seguir la ruta de hoteles que encontraréis en nuestro artículo sobre gastronomía con cinco estrellas.