Nos fascinan los chefs. A nuestros ojos son como rock stars que consiguen transmitir, emocionar y poner la piel de gallina con sus platos y su creatividad. Y si hay algo que nos flipa más que esos chefs generadores de experiencias… ¡son los chefs itinerantes! Nos explicamos: tuvimos el placer de conocer en primera persona la cocina de Walter el Nagar en Barcelona gracias a su tour por Europa. Sin esta escala en Barcelona, ¡nos habría sido casi imposible cruzar el Atlántico para plantarnos en Los Ángeles para probar sus platos!
El Nagar es de origen italiano y ha cosechado gran éxito en L.A. con su restaurante pop up Barbershop Ristorante en los últimos años. Hombre de mirada tímida pero actitud corporal dinámica, abandonó una carrera como Art Curator para abrazar la experimentación culinaria. Efectivamente, Walter decidió que sería un cocinero nómada, y los espacios donde cocinara, su laboratorio gastronómico para aprender, crecer y comunicar. No sabemos si el boom de Barbershop en California era un éxito esperado para él pero en todo caso nos imaginamos que su genio se quedaba enclaustrado allí. Como todos los valientes, se despidió de sus incondicionales y junto a su equipo se ha embarcado en un tour que le llevará por Barcelona, Ibiza y Milán.
Según nos contó el propio chef, desembarcó en nuestra ciudad sin saber qué menú serviría en sus sesiones en La Foodieteca. Dejó las maletas y buceó en los mercados locales para entender las bases de la herencia gastronómica de Barcelona para adaptarla a su estilo. Y damos fe que el menú de 5 platos más postre que comimos era brillante, vibrante, con sorpresa tras sorpresa, con un cuidado pairing de vinos y cavas locales. Para nosotros, los linguine de galera, erizo de mar y almejas con tomate y ajo negro fueron excepcionales, picantes, super sabrosos.
¿Ganas de probarlo? Última oportunidad los días 1 y 2 de julio, o tendrás que ir hasta Ibiza y juntarte a nuestras plegarias para que después de Milán, decida regresar a Barcelona. El precio, ajustado: 65€/pax (95€ si incluyes el maridaje).
Fotos © Jordi Domenech